El Ayuntamiento de Sueca, a través de la Concejalía de Medio Ambiente, ha mantenido una reunión con representantes de la Dirección General de Costas y Medio Marino (dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica), de la Asociación de Vecinos de Motilla y de la empresa encargada de la instalación de las barreras flotantes, para intentar encontrar una posible solución que mejore el problema de la desembocadura de las acequias en el mar, en concreto en la conocida como Gola del Rei, o del Mareny, en la playa de Motilla, especialmente en lo relativo a la turbidez de las aguas que, aunque no se trata de un requisito normativo, supone una importante merma en la calidad de las playas. Pese a no tener competencias en este asunto, desde el Ayuntamiento se continúa trabajando en la búsqueda de acciones que mejoren la situación, a la espera de una solución definitiva por parte de las administraciones superiores.
El alcalde de Sueca, Dimas Vázquez, ha explicado que esta situación se viene produciendo desde hace muchísimo tiempo y que, “es en esta legislatura, cuando más se está actuando por parte del Ayuntamiento, sin tener competencias en la materia, y con recursos municipales, para encontrar soluciones efectivas provisionales que aminoren el problema, porque las soluciones definitivas tiene que llegar con recursos estatales, que son quienes tienen las competencias, o incluso europeos en el tema de la reutilización del agua. El año pasado colocamos unas barreras flotantes para impedir que residuos sólidos llegaran al mar. Este verano, con las mismas barreras, hemos conseguido ya que aproximadamente 6 toneladas de estos residuos no lleguen a nuestras playas. Todo ello con recursos propios”. Así mismo, ha señalado el empeño por seguir trabajando desde la gestión municipal por buscar soluciones, “hacía muchos años que no se actuaba ante este problema, las últimas barreras que se instalaron fueron para la celebración de la Copa América, en 2007. Desde entonces, no se había hecho nada hasta el año pasado. El Ayuntamiento, en definitiva, no es el máximo responsable de que el agua salga en esas condiciones, pero estamos haciendo todo lo posible por encontrar una solución”.
Para la concejal de Medio Ambiente, Carmen Pérez, "hay que tener en cuenta que la gola del Rei es la desembocadura natural histórica de La Albufera, por lo que no es fácil encontrar una solución definitiva, en la que interviene la Comunidad de Regantes, y que depende de administraciones superiores y cuya solución supone una inversión económica más que considerable. Tanto la calidad del agua como su vertido al mar, son competencia de la Dirección General del Agua de la Conselleria”. Carmen Pérez ha indicado también que, desde el Ayuntamiento, y ante la preocupación que se tiene, se sigue insistiendo en la consecución de una solución al problema para que el agua a la salida de la gola del Rei ofrezca las mejores condiciones posibles. Para ello, y dentro de las posibilidades del consistorio, se están llevando a cabo medidas a fin de atajar los distintos componentes del problema, como la instalación de barreras de retención de residuos flotantes, que funcionaron muy bien en el verano de 2021, y que este año se han instalado de nuevo con la novedad de que, a partir de ahora, se mantendrán durante todo el año.
Otra de las actuaciones que se ha desarrollado el pasado mes de julio ha sido la instalación experimental de cortinas antiturbidez en la salida de la gola, pero la fuerza de la corriente de salida no ha permitido su efectividad. No obstante, desde el Departamento de Medio Ambiente se ha propuesto otra solución con más probabilidad de éxito, que es la que se abordó en la reunión, y que podría implementarse el próximo verano. Tanto los representantes de Costas del Ministerio como de la Asociación de Vecinos de Motilla han considerado positivamente, a priori, esta opción.
La propuesta consistiría en crear, durante la temporada de baño, un canal compuesto por dos cortinas antiturbidez que conducirían las aguas de la gola decenas de metros mar adentro, de manera que la desembocadura efectiva de las mismas se realizaría alejada de la costa. Este sistema consiste en una cortina sumergida y semipermeable, montada sobre flotadores y lastrada en el fondo y en la orilla, que impide la dispersión de los sólidos en suspensión pero no el paso del agua. Así pues, concentrando la zona de decantación del sedimento fino en la propia salida de la gola, se pretende mejorar la transparencia del agua en las playas de Motilla y del Rei. "Se trataría, en caso de ser efectiva, de una solución mucho más económica, reversible y sin apenas repercusión sobre la dinámica litoral, en comparación con otras que en su día se barajaron, como por ejemplo, la prolongación de las escolleras", ha añadido Carmen Pérez.