Julio y agosto están siendo meses con muchas incidencias para la Policía Local de Carcaixent. La mayor parte de ellas son actuaciones habituales, como el control del estacionamiento indebido, la asistencia en accidentes de tráfico o la mediación en conflictos entre particulares. Pero otros resultan atípicas y necesitan de intervenciones poco usuales.
Un ejemplo se produjo la pasada semana, cuando los agentes de la Policía Local identificaron un pirómano reincidente al término. Después de seguirle la pista durante un tiempo, puesto que el individuo contaba con numerosas incidencias y posibles implicaciones en incendios, fue sorprendido mientras estaba botándole fuego en un campo situado al Camino del Rajolar.
Tan solo unos días antes la Policía Local prestó auxilio a un parapentista que cayó en la zona del Huerto de Lechón a causa del fuerte viento producido por un chasquido cálido que le impidió activar el paracaídas. Sin embargo, la asistencia de los policías y los intentos de reanimación que tuvieron lugar hasta la llegada de los servicios sanitarios no fueron suficientes para salvarle la vida.
Por otro lado los agentes consiguieron identificar, después de una minuciosa investigación, los autores de las pintadas del mobiliario urbano de uno de los parques infantiles renovados recientemente por el consistorio, concretamente el que se encuentra situado en la Plaza de España, y entre los cuales se encuentran tres menores de edad.
Paco Salom, alcalde de Carcaixent, subraya la importancia de las actuaciones efectuadas por el cuerpo de la Policía Local porque "son esenciales para garantizar la seguridad ciudadana y la convivencia" y agradece a los agentes la tarea que realizan diariamente en el municipio.