Alrededor de 10.000 propietarios de perros de la comarca de l'Horta Sud han solicitado ya el bono gratuito que ha puesto a su disposición la Mancomunitat de l'Horta Sud para la creación del censo comarcal de ADN canino. La campaña arrancó el pasado 24 de noviembre y se amplía hasta el 31 de enero para solicitar el bono y hasta el 28 de febrero para realizar la prueba genética.
Los propietarios de los canes de la comarca pueden seguir solicitando su bono gratuito a través de la página web mancomunidadhortasud.adncanino.es. Una vez validada su solicitud por cada uno de los ayuntamientos de la comarca que son los encargados de comprobar que el propietario está empadronado en la localidad, el solicitante recibe en su teléfono móvil el bono. Con ese bono ya puede acudir a cualquiera de las más de 60 clínicas veterinarias de la comarca a realizarle la prueba a su mascota.
El plazo para solicitar el bono gratuito finalizará el próximo 31 de enero. A partir de esa fecha los propietarios de los perros tendrán que abonar el coste de la misma, fijada en 36,30 euros. Para realizar las pruebas en las clínicas, el plazo finalizará el 28 de febrero de 2023.
El objetivo de la Mancomunitat con esta iniciativa es la de crear un censo canino para la comarca que pueda favorecer la protección de los animales así como la detección de los propietarios incívicos que abandonan los excrementos de sus mascotas en la vía pública.
Para ello, desde la entidad comarcal se trabaja en una ordenanza tipo que será puesta a disposición de los ayuntamientos para que sea aprobada por sus respectivos plenos. La intención final es que el servicio de recaudación de multas de la Mancomunitat se encargue de gestionar las posibles sanciones que acarreen las conductas incívicas con los excrementos caninos. Además, está previsto que se penalice también la no inscripción en el censo canino comarcal con lo que la realización de las pruebas para el registro será obligatoria.
"Como siempre hemos dicho la Mancomunitat está para asistir a los ayuntamientos. En este caso todos los que no tenían un censo de ADN local nos transmitieron la necesidad de ponerlo en marcha. También los que ya lo tenían instaurado por el hecho de poder controlar a los perros que pasean por su localidad sin estar censados por residir sus propietarios en otros municipios", ha explicado José Cabanes, presidente de la Mancomunitat de l'Horta Sud.