Primera semana d'Escola d'Estiu y Campus Jove en Alboraya y primera semana de éxito. 200 niños y niñas y 30 adolescentes llevan desde el lunes disfrutando de esta iniciativa anual que consigue un doble objetivo: divertir y entretener a vecinos y vecinas menores de edad parte del verano y permitir que sus familias puedan conciliar con su jornada laboral.
Usar las hojas de los árboles que caen y pintura para sacar su lado más artístico, conocer la fauna marina en el Oceanográfico y disfrutar de un chapuzón refrescante en la nueva piscina de verano son algunas de las propuestas que ya han realizado durante esta primera semana. También se han dejado llevar por la imaginación, dibujando su planeta Tierra ideal (algún mundo lleno de gatos), haciendo manualidades para construir lagartijas o aviones e, incluso, escribiendo una especie de diario.
El Espai Jove, por su parte, ha sido testigo de un desfile de moda de lo más estrafalario, de ubicar regiones y países en un mapa del mundo dibujado y de aprender a plantar vegetación en una botella de plástico para concienciar sobre el medio ambiente y la importancia de la reutilización de los residuos.
Para comprobar su funcionamiento y apuntar mejoras para los próximos años, el alcalde de Alboraya, Miguel Chavarría, acompañado del Concejal de Educación y Juventud, Ismael Rubio, han visitado los tres espacios habilitados donde se está llevando durante el mes de julio estas iniciativas. En el CEIP Ausiàs March, CEIP Cervantes y el Espai Jove, que están abiertos cada mañana con una gran cantidad de monitores y actividades, han podido hablar directamente con el personal y con el alumnado.