El PP valenciano está eufórico tras el vuelco político en la ciudad de Alicante. El voto en blanco de Nerea Belmonte, ex de Guanyem (la marca de Podemos en la localidad), ha permitido que los populares se hicieran con el gobierno local. El PSPV llegaba con 14 votos asegurados y les faltaba uno más, que habían confiado a Belmonte. Sin embargo, su voto en blanco ha dejado la alcaldía en manos de Luis Barcala, portavoz del PP. Y en les Corts Valencianes, la noticia ha caído como un jarro de agua fría para unos, como una bendición celestial para otros.
Isabel Bonig, portavoz del PP en les Corts ha mostrado la "alegría" y el "orgullo" de su partido al conocer la información, y ha trasladado el "apoyo total y absoluto" al grupo liderado por Barcala en Alicante. "La reconquista empieza por el sur", ha anunciado, después sigue por Castellón para acabar conquistando el centro, València, ha dicho.
Isabel Bonig, síndica del PP en les Corts | P. PLAZA
En ese sentido, la lideresa del charrán en la Comunitat ha apuntado que en su partido "se van a dejar la piel" aunque ha admitido que, a un año de los comicios autonómicos, "poco se puede hacer". En todo caso, ha querido destacar las "ganas de trabajar" que existen en el grupo local del PP.
También ha aprovechado su intervención en la cámara autonómica ante los medios para criticar al anterior gobierno liderado por Gabriel Echávarri (PSPV), apartado por posible fraccionamiento de contratos. Según Bonig, la ciudad se encontraba anclada en "el ostracismo", con un gobierno local cuyo "único proyecto era tirar al PP", guiándose por el "odio y la venganza".