En torno a diez mil personas han participado durante los últimos diez días en las actividades del Festival Mostra Viva del Mediterrani (MVM), que este domingo cerraba su edición de mayor éxito con sus últimas actividades.
Más de 350 artistas y creadores y un centenar de técnicos han participado y colaborado en este encuentro cultural dirigido a mostrar la realidad cultural de los países del Mediterráneo, influencias, conexiones, sinergias e identidad cercana entre ambas orillas y, sobre todo, su proximidad cultural, étnica y social.
Esta interconexión y proximidad cultural se ha realizado a través de debates, actuaciones musicales, proyecciones cinematográficas, exposiciones, talleres, representaciones teatrales y de circo, narraciones orales, lecturas poéticas o talleres didácticos que han servido para mostrar la diversidad y cercanía cultural de la veintena de países participantes.
Para la organización de MVM, esta edición ha supuesto un verdadero punto de inflexión, no sólo por el nivel de participantes y participación sino sobre todo por el seguimiento realizado por la sociedad valenciana que ha vuelto a descubrir lo mucho que nos une en el ámbito ribereño en un momento de conflictos y situaciones complicadas en los países del Sur.
La organización de MVM quiere destacar no sólo la importarte implicación institucional en la edición de este año y su compromiso con él y la cultura mediterránea, sino sobre todo la conciencia e implicación de la propia sociedad valenciana en el Festival, como así ha quedado patente con su participación en las ochenta proyecciones cinematográficas realizadas en sus respectivas secciones y la participación en las más de treinta actividades culturales celebradas en su decena de sedes. Sin olvidar que ha sido epicentro de debate y reflexión en torno a las realidades culturales de los países participantes.
Mostra Viva anima a la sociedad valenciana a continuar colaborando con este proyecto consolidado como plataforma universal de debate y encuentro cultural y que recupera el espíritu iniciado en los años ochenta, hoy más que necesario por la situación geopolítica y social. Más aún cuando el Festival está consolidado como plataforma y ventana desde la que observar y conocer la diversidad y proximidad cultural a través de una perspectiva contemporánea.
El Festival despedía ayer su edición de 2017 con dos nuevas actividades públicas que contaron con una gran participación popular: el cierre del ciclo de circo en los Jardines del Palau de la Música, o la actuación de la Banda “Música Jove” de Benimaclet-València, bajo la dirección de Enrique Barrachina. La formación ganaba recientemente el Primer Premio y la Mención de Honor en el 41 Certamen de la Diputación de Valencia en su sección cuarta. Ofreció un vibrante concierto en La Nau de la Universitat de València con un programa compuesto por música de cine.