La Junta de Gobierno Local ha aprobado este viernes una moción del alcalde de València, Joan Ribó, mediante la cual se delimita y se propone el conjunto rural-urbano de La Punta-Nazaret-Fonteta de Sant Lluís para que pueda acceder a las ayudas estatales del programa ARRU (Ayudas a la Regeneración y Renovación Urbana y Rural del Plan Estatal de Vivienda 2018-2021). Así lo ha anunciado el vicealcalde y portavoz municipal Sergi Campillo, al término de la reunión de la Junta.
Campillo ha comenzado su intervención ante los medios, acompañado de la vicealcaldesa, Sandra Gómez, con un mensaje de «solidaridad con la alcaldesa de Paiporta, que ha sido objeto de unas declaraciones execrables por parte de un responsable de la Guardia Civil de la localidad», tal como ha recordado el vicealcalde. «Desde el Equipo de Gobierno Municipal mostramos todo nuestro apoyo y estima, y esperamos que se depuren responsabilidades ante una cuestión como ésta, que es realmente sorprendente que se dé en un Estado de Derecho avanzado como es el nuestro», ha afirmado.
Respecto al programa ARRU, Campillo ha recordado que se trata de una herramienta que permite que los ayuntamientos puedan optar a tener una financiación por parte del Estado para dignificar zonas que están degradadas. «El ARRU que todos tenemos en mente es el del Cabanyal –ha señalado el vicealcalde- gracias al cual se han hecho muchísimas actuaciones públicas en el barrio, además de las actuaciones privadas en función de la línea muy importante de subvenciones para que las personas particulares también puedan sufragar una parte destacada de la rehabilitación de sus viviendas».
Lo que se pretende con la iniciativa aprobada hoy es actuar sobre «una zona de València que ha sufrido una gran presión de infraestructuras importantes, como la infraestructura portuaria o incluso la depuradora de Pinedo, que han hecho que el paisaje urbano se degrade», ha explicado Sergi Campillo. «Por eso, lo que queremos al solicitar un ARRU específicamente urbano y rural, es ayudar a la dignificación de la zona a través de acciones como la rehabilitación de las alquerías o intervenciones sobre el paisaje urbano de la zona». El proyecto se dirige a impulsar actuaciones en la huerta de La Punta y los conjuntos históricos y contiguos de Nazaret y la Fonteta de Sant Lluis, «una zona históricamente de gran valor paisajístico, de huerta y con casas de tipología tradicional valenciana, que se ha ido degradando, pero que queremos poner en valor y ayudar a restañar el efecto de todas las infraestructuras de actuaciones que se han hecho en esta zona de la ciudad durante las últimas décadas».
TELEFONÍA E INTERNET DE LAS COSAS
En otro orden de cosas, la Junta de Gobierno Local ha aprobado la contratación de los servicios de telecomunicaciones que incluye el llamado Internet de las cosas. En esta ocasión se han unificado los contratos de telefonía móvil y fija, que hasta ahora se ofertaban por separado, y que ahora se plantean en un único contrato con tres lotes: la telefonía móvil, la telefonía fija y internet de las cosas, que es el lote novedoso.La Concejalía de Gestión de Recursos, que dirige Luisa Notario, ha elaborado el pliego de condiciones, con la colaboración de la Concejalía de Administración Electrónica, a cargo de Pere Fuset. El presupuesto alcanza 1.674.000 €, y la duración prevista es de dos años prorrogables dos más, de manera anual. Tal como ha explicado el vicealcalde, Sergi Campillo, «queremos mirar la calidad que ofrecen los operadores de comunicación en todo el territorio, la conexión inalámbrica tanto en edificios municipales como en espacios públicos, o la articulación del despliegue de dispositivos de internet, en el marco del impulso y la apuesta que València ha hecho como Smart City».
En este mismo sentido, en la sesión de hoy también se ha aprobado la licitación del contrato de limpieza de mercados y dependencias municipales en una única oferta conjunta, dado que hasta ahora habían sido dos contratos independientes (además hay un tercer contrato para el mantenimiento y limpieza de las escuelas públicas, tanto titularidad municipal como de la Generalitat). En el caso de los dos contratos de mercados y edificios municipales, que ahora se unifica, afecta a un total 316 edificios, que se limpiarán ordinariamente a través de este contrato, «que prevé una plantilla necesaria de 181 trabajadores de diversas categorías y que mantiene las cláusulas socioambientales que se incorporaron en el mandato anterior», ha destacado Sergi Campillo.