La Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado ha denunciado el "ataque" que han sufrido activistas de la Asamblea Ciudadana contra el Racismo de València (ACR) quienes, en una concentración realizada este sábado frente a un local de la ciudad han sufrido varias agresiones y ataques. La concentración responde a un vídeo viral en el cual aparece uno de los camareros del restaurante realizando comentarios de corte racista a un joven que había entrado para pedir cambio.
La concentración, fue convocada por la ACR con el respaldo de varios colectivos frente a este bar. Desde la Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado han señalado mediante un comunicado que la concentración respondía a que en el lugar se había cometido "una grave agresión verbal y numerosas vejaciones hacia una persona migrante racializada que entró a dicho establecimiento a pedir cambio, y que fue insultado y objeto de burla por el propietario del local".
Así, este sábado, varias personas, que según denuncia la red estarían vinculadas al dueño del local, han "agredido, increpado e insultado a las compañeras y compañeros que han realizado un acto en todo momento pacífico hasta que el propio personal del citado local arremetió contra las compañeras de las Asociaciones y plataformas convocantes".
Ante esta situación, desde la Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado se ha trasladado el caso a los servicios jurídicos, que interpondrán la correspondiente denuncia ante el juzgado de guardia de Valencia, por agresiones y amenazas en concurso con un delito de odio.
En palabras del presidente de la Red, Daniel Méndez, "esto no es un mero encontronazo en una concentración". "Hay una evidente componente de odio. Para garantizar que no haya dudas y la instrucción transcurra por donde es lógico que lo haga, nuestros servicios jurídicos acudirán directamente al Juzgado de Guardia para, con el abundante material audio visual que nos están aportando los medios de comunicación que cubrieron la concentración, pedir responsabilidad penal contra los agresores algunos vinculados directamente al propio local", ha agregado.
Así, la Red ha instado al Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat Valenciana a que, una vez interpuesta la correspondiente denuncia ante el juzgado de guardia, se personen siguiendo el mismo cauce que existe en los casos de violencia de género para "evidenciar que las instituciones valencianas no van a quedarse quietas ante un local cuyos propietarios agreden a manifestantes y discriminan a migrantes y personas racializadas".
"MOMENTOS DE TENSIÓN INTOLERABLES"
Al respecto también se ha manifestado la concejala de Cooperación para el Desarrollo y Migración del consistorio valenciano, Neus Fàbregas, quien ha señalado que en València "no se acepta el racismo".Mediante un tuit, la edil ha indicado que la protesta respondía al "trato denigrante y racista que se viralizó en redes" y ha criticado que se "ha tratado de impedir la protesta y se han producido momentos de tensión intolerables".