La linea 10 de Metrovalencia está muy cerca de convertirse en realidad. Desde que la Generalitat Valenciana adjudicara las obras de construcción de la superestructura que va desde Amado Granell hasta Nazaret, ya solo queda esperar a que se concluyan las obras. De ser así, la inauguración de la linea 10 se haría efectiva en los plazos estipulados que se presentaron en el proyecto inicial. El conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, ha señalado que actualmente, tras la adjudicación de la última actuación, "todos los tramos de la futura Línea 10 están ya en marcha, en distintas fases, ya que hay proyectos finalizados, en obras o pendientes del inicio de las mismas con los trámites administrativos resueltos".
Por lo tanto, las obras de la nueva línea de Metro ya está en la fase final. La construcción la nueva línea tiene un valor añadido para los ciudadanos de la ciudad de València, ya que borra el primer intento de llevar a cabo de este tramo, inicial mente llamada T2, y que fue un fracaso en términos absolutos, pues no se llegó a construir; y económicos, siendo un gasto su construcción y su desmantelamiento por encontrarse en pésimas condiciones después de pasar casi 10 años en desuso. Desde que las obras se paralizaran en 2011, las zonas construidas sufrieron un deterioro palpable hasta el punto de resultar más económico su retirada y construcción de nuevo, que arreglar lo que ya estaba instalado.
Para Arcadi España el avance de la actuación "es una buena noticia que certifica el esfuerzo de la Generalitat por impulsar una importante obra para la ciudad de València y para el transporte público en general, avanzando en el compromiso de concluir la L10 lo antes posible y seguir así con apuesta por una movilidad sostenible".
Y es que la adjudicación de las obras del resto del proyecto, suponen el último paso para que la L10 comience a funcionar, salvo que ocurra un imprevisto de fuerza mayor. El presupuesto destinado a la ejecución de estos trabajos, adjudicados por Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) a la UTE formada por las mercantiles COMSA, SAU-Levantina Ingeniería y Construcción SL es de 6.205.350 euros, IVA incluido, cuyo proyecto de construcción está cofinanciado por la Unión Europea, a través del programa operativo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) de la Comunitat Valenciana 2014-2020.
¿Qué supone la construcción de esta línea de Metro para la ciudad de València? En primer lugar, unifica una parte de la ciudad que estaba "desconectada" del centro. Los vecinos de Nazaret ya habían reclamado en varias ocasiones un transporte que les integrara en el área metropolitana de la ciudad. De esta forma, se fomenta el uso del transporte público en la zona y se abre el barrio a la comunicación con el resto de la ciudad, pues hasta ahora solo llegaban algunas líneas de autobús. Por otro lado, la construcción de la L10 supone un avance para el conjunto de la ciudad, pues es un paso firme hacia la movilidad sostenible.
La sostenibilidad, la responsabilidad ecológica y los espacios verdes son la base de los cambios que se están produciendo en la ciudad del Túria. Desde que en 2015 se produjera el cambio de Gobierno, el Ayuntamiento de València ha apostado por el fomento de la bicicleta, la construcción del Anillo Ciclista, entre otras apuestas para conseguir una movilidad más responsable. La reordenación de la circulación del centro, la peatonalización de las plazas más emblemáticas o la construcción del doble carril para EMT y Taxi en la calle Colón, también son muestras del compromiso de la Generalitat por encauzar las obras de la ciudad en esas bases. Ahora, con la nueva linea de Metro, València está un paso más cerca de convertirse en la ciudad sostenible que pretende competir con las ciudades verdes más grandes de Europa.