El pasado mes de diciembre el Ayuntamiento de Almussafes llevó a cabo los trabajos para el reasfaltado de dos tramos de los caminos lindantes al Camino Romaní, que suman un total de 1.699 m² de superficie. La intervención requirió una inversión de 15.393,14 euros, IVA incluido, cantidad que financió íntegramente el consistorio municipal. La obra fue adjudicada a la empresa Guerola Transfer, S. L. U. El objetivo de la Concejalía de Urbanismo con este tipo de acciones es asegurar la adecuada circulación de vehículos.
El mantenimiento de las calzadas situadas en el término municipal de la población para garantizar la seguridad del tráfico es uno de los principales objetivos del Ayuntamiento de Almussafes en materia de urbanismo, motivo por el que son habituales las obras para poner a punto las zonas asfaltadas. El pasado mes de diciembre, el consistorio ejecutó una nueva intervención en este sentido. Los caminos lindantes al Camino Romaní fueron objeto de un proceso de reparación consistente en su repavimentación con una nueva capa de asfalto, previa limpieza y eliminación de los baches del firme existent.
Se actuó sobre dos tramos, uno con una longitud aproximada de 195 metros y una superficie de 925 m² y otro con una longitud de 180 metros y una superficie de 774 m², por lo que en total el proyecto contempló la mejora de 1.699 m² de vía. La obra, que se desarrolló en un periodo de dos días, fue adjudicada a la empresa Guerola Transfer, S. L. U. por un importe de 15.393,14 euros, IVA incluido. Tal y como se recoge en la memoria, se trata de dos tramos que se encontraban “en un estado deficiente para su uso como vías de circulación, presentando numerosos desperfectos en su firme”.
Davinia Calatayud, concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de la localidad, recuerda que este departamento municipal “revisa periódicamente el estado de todas las vías y establece las prioridades a la hora de emprender este tipo de acciones, siempre con la intención de garantizar una adecuada circulación de los vehículos”. “En base a este estudio se decide el destino de los fondos que se reservan para ello en el presupuesto municipal o en las subvenciones que se solicitan para estos trabajos a otras administraciones”, señala la edil.
En estos dos tramos se detectaron “peligrosos baches” en la superficie, desperfectos por agrietamiento y, sobre todo, un avanzado desgaste del firme. Para subsanar estos problemas, las tareas consistieron en el desbroce del lateral de los caminos y limpieza de los mismos, el escarificado del pavimento existente, el riego de adherencia y la colocación de una nueva capa asfáltica, que es de 5 centímetros de espesor mínimo en todo el ancho.