El Ayuntamiento de Albal ha sido distinguido por la Conselleria de Obras Públicas, Transporte y Movilidad Sostenible por el proyecto de semipeatonalización del centro histórico. El alcalde, Ramón Marí, ha recogido hoy el Primer Premio, en la categoría de consistorios de menos 20.000 habitantes, acompañado del Ingeniero y la arquitecta municipal, Óscar González y Manuela Molina. El acto se ha enmarcado en la Jornada valenciana por la movilidad sostenible que se ha celebrado en la Ciudad Administrativa 9 de octubre, presidido por el Conseller Arcadi España quien ha entregado el galardón al primer edil albalense.
Para Ramón Marí la actuación en el núcleo antiguo era una necesidad, “hemos conseguido crear un entorno agradable y con mejor movilidad, especialmente, para los residentes más mayores que ahora disfrutan más y mejor de la zona donde residen”. Esta intervención también ha puesto en valor el entorno de La Torre del siglo XI que constituye una membrana fundamental del pueblo. El alcalde, especialmente contento tras recibir el galardón, ha manifestado “que es un premio de todas y todos” y ha agradecido el trabajo técnico de la Policía Local del y Departamento de Urbanismo, así como la colaboración económica de la Diputació de València para su ejecución. Por último, también se ha referido a la ciudadanía que ha participado en la reordenación del centro histórico y cuyas opiniones se han tenido en cuenta.
Un centro histórico donde prima la movilidad
Las obras de remodelación del centro histórico concluyeron a principios de este año, han contado con una inversión que supera los 350.000 euros y con fondos de la Diputació, que aportó 150.000 euros. En las actuaciones prima el peatón frente al vehículo, se ha contado, entre otras, con diversas valoraciones técnicas que han recomendado que algunas de las vías fueran de acceso restringido a los residentes y la prohibición de aparcamiento para que, en caso de emergencias, fuera posible la entrada de los Bomberos y ambulancias. Se ha introducido vegetación autóctona que da sombra y que es compatible con el clima y de baja demanda híbrida. Se ha incrementado la dotación de mobiliario urbano y se ha mejorado la iluminación con descenso de consumo. La zona ha disminuido considerablemente las barreras arquitectónicas teniendo en cuenta que, en la zona, residen personas mayores.Las calles que se han convertido en semipeatonales son: Juan Esteve, La Torre, Cronista Jesús Emilio Hernández, Julio Nebot, Carrer Llarg y las plazas del Santísimo y de La Torre. Albal ha mantenido su torre islámica del siglo XI que fue declarada como Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de Monumento desde 2002.