Ara Malikian conquistó el pasado domingo a las miles de personas que acudieron a disfrutar en directo de su exhibición de violín en la Plaza de Toros de Valencia, en un magistral concierto que confirma el despertar sociocultural del coso de la calle Xàtiva, promovido por la Diputación de Valencia y en concreto por el área que dirige el diputado Toni Gaspar.
El violinista español de origen libanés convirtió la arena teñida de rojo en una improvisada sala de conciertos y ofreció a sus seguidores un gran espectáculo que se suma a otros episodios musicales vividos el presente año con Manolo García, Alejandro Sanz, Enrique Bunbury o Malú, y que precede a otro esperado evento programado para el 24 de septiembre, con el regreso a los escenarios de Víctor Manuel, Ana Belén, Joan Manuel Serrat y Miguel Ríos.
‘El gusto es nuestro’ no será el último concierto del año en la Plaza de Toros. El 6 de octubre el protagonista será Raphael, mientras que el día 14 del mismo mes se subirá al escenario la cantautora y compositora mexicana Ana Gabriel. También en octubre tendrá lugar el concierto de bienvenida del curso de la Universitat de València, y ya ha entrado la petición de la plaza para el concierto de Charango en octubre de 2017.
No sólo música
La música ha sido protagonista este año en la Plaza de Toros, pero no sólo la música. El plan de dinamización de la plaza, puesto en marcha por el equipo de gobierno de Jorge Rodríguez para incluirla en los circuitos culturales y turísticos de la ciudad, incluye otras muchas acciones.
El objetivo de los nuevos gestores de la Diputación de Valencia es que la Plaza de Toros tuviera un uso habitual y no sólo en los dos episodios taurinos anuales. En esta línea de trabajo se firmó el convenio con la Universitat para trabajar en ese plan de dinamización y activación patrimonial, que a partir del próximo verano ofrecerá a los visitantes una serie de rutas culturales para acercar tanto a los valencianos como a los turistas la historia de la Plaza.
El trabajo que desarrolla el Departamento de Sociología y Antropología Social de la Universitat, que tendrá en cuenta las nuevas tecnologías para adaptar el contenido a tablets y aplicaciones móviles, bucea en el pasado de una Plaza de Toros que ha llegado a ser campo de concentración, ha proyectado cine y teatro y ha sido escenario de grandes mítines políticos. También ha acogido competiciones deportivas y hasta se han quemado fallas. Otro fuego, el del incendio de 1946 causado por unos indigentes, también forma parte de esa historia de uno de los iconos de la ciudad.
En espera de completar ese plan de dinamización sociocultural, la Diputación seguirá abriendo la Plaza de Toros a la ciudadanía y dándole un uso continuado durante todo el año. Otros eventos confirmados son el circo en Navidad, cuyo proceso de licitación se abrirá en breve, y las cenas de gala que se están empezando a cerrar con las empresas que lo solicitan al área de dirige Toni Gaspar.