El alcalde de València, Joan Ribó, y la consellera de Obras Públicas y Territorio, María José Salvador, han firmado esta mañana, en presencia de Ximo Puig, president de la Generalitat, la cesión al Ayuntamiento de los Tinglados 4 y 5 del Puerto de València. Esta cesión de unos tinglados que el gobierno municipal anterior cedió, a su vez, con motivo de la primera edición de la Fórmula 1 para su conversión en boxes y zona VIP, se produce después de haberles devuelto su estado original y previamente a su rehabilitación, con financiación europea, para ser cedidos a la Marina de València, que los destinará a usos culturales y de fomento de la innovación.
«Quiero expresar la profunda satisfacción por recibir los tinglados que el Ayuntamiento de València cedió para albergar instalaciones de la Fórmula 1, en cumplimiento del acuerdo al que se llegó con la Generalitat, que había de devolverlos en su estado inicial», ha afirmado Joan Ribó tras la firma, en uno de los tinglados, de la recepción de estos tinglados construidos a principios de la segunda década del siglo pasado. El Tinglado 5 tiene una superficie de 7.500 metros cuadrados, mientras que el Tinglado 4 ocupa 9.000 metros cuadrados, que ahora el Ayuntamiento rehabilitará con ayuda de fondos europeos FEDER, que ya ha solicitado, como paso previo a ponerlos a disposición de La Marina de València.
«Se llegó a un buen acuerdo y hoy nos hemos de felicitar de que estos tinglados vuelvan al Ayuntamiento de València. ¿Qué vamos a hace con ellos? Hemos pedido dinero de los fondos FEDER para su rehabilitación. Europa financiará el 50%, mientras que el otro 50% lo aportará el Ayuntamiento, y una vez acaba esta rehabilitación los cederemos a la Marina de València para que les dé el uso que sea pertinente y que decidiremos entre las tres administraciones que estamos representadas en el Consorcio. Evidentemente no se va a dotar a estos espacios de unos usos ajenos a la actividad de La Marina, que está trabajando fundamentalmente innovación y cultura. Una vez estén rehabilitados se acabará de decidir», ha añadido Ribó al finalizar esta firma a la que han asistido concejales del Ayuntamiento como Vicent Sarrià, Giuseppe Grezzi, Ramón Vilar, Fernando Giner o Eusebio Monzó, el director del Puerto de València, Aurelio Martínez, además del director general de La Marina, Vicent Llorens, que han asistido a las explicaciones que Helena Beunza, directora general de la Entitat Valenciana d’Habitatge i Sól, ha ofrecido sobre una rehabilitación para devolver los tingados a su estado original y llevada a cabo en tan solo dos meses.Joan Ribó ha afirmado que la cesión de los tinglados, una vez devueltos a su estado original tras la intervención de la empresa pública EVHA, «es un paso importante para la normalización de estas instalaciones, para que vuelven a ser lo que siempre habían sido, y también es un paso importante para que La Marina de València coja la velocidad de crucero que ya está comenzando a coger». Tras puntualizar que el coste de la rehabilitación se computará como recursos que el Ayuntamiento de València habrá aportado a La Marina, Ribó ha expresado su deseo de que «la rehabilitación se haga lo más rápido posible. Queremos darle la máxima velocidad que podamos porque estos tinglados tan impresionantes tienen unas posibilidades inmensas y son muy importantes para el futuro de La Marina».
ECONOMÍA CIRCULAR
La consellera María José Salvador ha asegurado que «esta firma es uno de los actos más paradigmáticos del cambio de modelo de los gobiernos de la Nau y el Botànic respecto a los anteriores. Estamos hablando de un espacio del que se privó a la ciudadanía para convertirlo en boxes y en zona VIP para la Fórmula 1,y hoy firmemos la cesión que refleja que hemos dado cumplimiento a nuestro compromiso de devolverlos al estado origina y retornar su titularidad a quien es su propietario: el Ayuntamiento de València».Salvador ha puesto en valor el método de trabajo empleado, basado en la economía circular, y que ha permitido la reutilización de 1.154 toneladas de acero, 19 toneladas de madera y del 100% de los equipos instalados, con una reducción extraordinaria del presupuesto inicial de los trabajos. «Quiero poner en valor el método por el que hemos optado para conseguir devolver los tinglados a su estado original. El presupuesto inicial era de un millón de euros, pero a través del sistema de economía circular, por el que la empresa que realizaba los trabajo podía quedarse con todo el material y proceder a su venta, de un millón hemos pasado a un coste final de 20.000 euros». La consellera ha resaltado esta cifra «frente a los casi 15 millones de euros que se gastó el gobierno anterior para poder convertirlos en espacio VIP para unos pocos. Nosotros hemos hecho el cambio a la inversa, y los hemos devuelto a la ciudadanía, listos para su rehabilitación y para darles el uso que finalmente La Marina decida».
Por su parte, el president de la Generalitat, Ximo Puig, ha resaltado que «la eficiencia, la eficacia y el buen trabajo conjunto han caracterizado este nuevo ejemplo de colaboración entre la administración autonómica y la local. “Se ha conseguiodo desde una eficiencia y eficiencia magníficas, y ese es el camino por elque también vamos a trabajar juntos en esta seguda etapa de la rehabilitación, sellando nuevamente esa alianza Ayuntamiento -Generalitat para la mejora de la ciudad de València».