El alcalde de València, Joan Ribó, y el presidente de la Autoridad Portuaria, Aurelio Martínez, han presentado conjuntamente el convenio para el uso ciudadano de 195.000 metros cuadrados de suelo portuario en el barrio de Natzaret, que contará con un Parque de Desembocadura de 63.800 metros cuadrados, una gran zona deportiva de 88.000 metros cuadrados, un área terciaria. Además se cede terreno para que el Jardín del Túria se prolongue hasta el mar.
“El lunes o el martes que viene las máquinas entrarán a trabajar en el futuro Parc de Desembocadura. Hasta ahora todo eran papeles y negociaciones, pero a partir de ahora la gente ya podrá comenzar a pasear en muy poco tiempo. Es un paso muy importante para el barrio de Natzaret i para toda la ciudad, muy importante para ir redirigiendo la fachada marítima, que es la gran asignatura pendiente que tenemos a nivel urbanístico en Valencia. Un paso que ha costado mucho dar, porque cuando trabajamos con entidades a nivel estatal las cosas cuestan más, pero al final hemos podido llegar y ya estamos aquí”, ha afirmado Joan Ribó tras la aprobación en el consejo de Administración de la Autoridad Portuaria que “supone la cesión para uso ciudadano de aproximadamente 195.000 metros cuadrados”.
De esta superficie, la actuación inmediata a la que ese ha referido el alcalde comenzará sobre 22.000 metros cuadrados de los que la ciudadanía podrá disfrutar en el plazo más breve posible. ”La cesión de estos 195.000 metros cuadrados en el Área de Natzaret va a ser el tercer espacio verde en superficie de la ciudad, del cual el Parque de Desembocadura ocupará 63.802 metros cuadrados. Al mismo tiempo se contempla la creación de una futura zona deportiva, un espacio de uso deportivo de 88000 metros cuadrados. “Va a ser una zona de pantalla entre el barrio de Natzaret y el Puerto, que me parece muy importante, y eso va a tener muchas consecuencias positivas de dinamización del barrio y también de la movilidad y conexión del barrio respecto a la ciudad. Ahora cuando pidamos que la T2 llegue a Natzaret podremos hacerlo con más fuerza.”
El alcalde Joan Ribó ha afirmado que este convenio “va a potenciar y dignificar el barrio de Natzaret y va a cambiar el panorama de las zonas verdes de la frontera litoral de València”. Este acuerdo supone también la cesión de 24.213 metros cuadrados que permitirán la recuperación parcial de la amplitud del antiguo cauce del Túria, en el tramo comprendido entre el Puente de Astilleros y el inicio de la obra de encauzamiento, y que el Jardín del Túria se prolongue con un nuevo sector cuyo ajardinamiento acometerá el Ayuntamiento.
Las obras que se acometerán de forma inmediata a partir de la semana que viene incluirán trabajos de limpieza superficial, desbroce y adecuación como zona de paseo y esparcimiento ciudadanos.
El convenio contempla la creación de un área terciaria (situada en parte del emplazamiento de las antiguas instalaciones de Moyresa), que contará con una superficie de 19.500 metros cuadrados y una edificabilidad de 25.000 metros cuadrados. ”Se sustituirá el muro de la antigua fábrica Moyresa para adaptarlo a las nuevas alineaciones y habrá una valla histórica entre la zona verde y el uso portuario”.
Ribó ha señalado que, tras la firma de este Convenio, “el futuro Parque de Desembocadura se puede empezar ya a concretar con los vecinos.”
Por su parte, Aurelio Martínez, Presidente de la Autoridad Portuaria, ha expresado su satisfacción “por este acuerdo que nos ha costado muchos meses de trabajo y esfuerzo conseguir y al que ha contribuido la buena sintonía que existe con el alcalde de València”. Ha añadido que el Convenio “devuelve a Natzaret algunos de los costes que ha tenido que asumir y culmina los acuerdos entre Ayuntamiento y Puerto que se iniciaron ya en 1986 y se ratificaron en 2013. La semana que viene vamos a ponernos manos a la obra para que los vecinos puedan visualizar una cosa que viene de 1986.”
Ha añadido que se trata de un antiguo espacio portuario “que se pone al servicio del Ayuntamiento y de los ciudadanos y ciudadanas” y también que “se va a mantener la valla por motivos de seguridad, como ocurre en otros parques que se abren al uso ciudadano durante el día.”