La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha publicado su predicción trimestral, que corresponde a los meses de noviembre, diciembre y enero. Unas predicciones todavía tempranas, pero en las que se aprecia que, después de un otoño marcado por la sequía y las altas temperaturas, el invierno que nos espera en la Comunidad Valenciana tampoco será muy diferente.
Y es que de acuerdo con la publicación de AEMET, el invierno se presenta con lluvias escasas, así como con un clima cálido. Tanto es así, que se estima que el termómetro oscilaría entre los 12,5 y los 14 grados en la región valenciana. Como es lógico, las temperaturas bajarán conforme se vaya acercando fin de año, pero las temperaturas seguirán siendo elevadas respecto a otros años. De hecho, las predicciones muestran que tan sólo existe un 10% de probabilidades de que el clima sea frío durante el próximo trimestre.
Por otra parte, la Agencia Estatal de Meteorología también ha realizado sus predicciones de lluvia, y todo apunta a que la situación no mejorará. En este sentido, la AEMET señala que existe un 60% de probabilidades de que estos meses de invierno sean secos en la Comunidad Valenciana, frente a un 25% de probabilidades de que sean húmedos. Unas predicciones alarmantes teniendo en cuenta la escasez de agua en los embalses. Pero además, si las precipitaciones en invierno, en nuestra ciudad, suelen oscilar entre 74 y 160 litros por metro cuadrado, se prevé que las lluvias que se produzcan estarán en la zona baja de este intervalo.
Unos datos preocupantes que podrían agravar la situación de sequía que se vive en nuestra comunidad. De acuerdo a los últimos datos del Ministerio de Medio Ambiente, la cuenca del Segura tiene las reservas de aguas más apuradas de toda España, con sus pantanos a tan sólo un 14,2% de capacidad, a la que le sigue los embalses de la Confederación Hidrográfica del Júcar, que se encuentran al 25,6%.