El Valencia ha sacado petróleo de su visita al Espanyol. Tras una primera parte en la que el conjunto blanquinegro estuvo desaparecido y excesivamente expuesto al juego del conjunto de Quique Sánchez Flores, el Valencia fue capaz de aguantar, gracias al excelente partido de Neto, y despertar en la segunda parte para sumar tres puntos de 'oro' pues a pesar de no jugar bien ha sido capaz de sumar como un verdadero campeón. El resultado no refleja lo ocurrido en el campo pero el gol de Kondogbia en el 67 y el de Santi Mina en el 83 hacen que el Valencia se mantenga en la segunda plaza de la clasificación y con el título de invicto para enfrentarse al líder, el Barcelona, el próximo domingo a partir de las 20:45 en Mestalla.
El Valencia fue de más a menos a lo largo de estos primeros cuarenta y cinco minutos. Poco a poco el Espanyol ganó confianza y arrinconó a un conjunto blanquinegro que no encontraba la forma de llegar al área local con peligro. Cosa que sí hacía el conjunto de Quique Sánchez Flores. Corría el minuto 37 cuando Gerand Moreno remataba al poste y ponía el susto en el cuerpo a los de Marcelino. El Valencia lo intentaba pero no era capaz de encontrar ese hueco, esa genialidad que le acercara con cierto peligro, y los disparos llegaban desde fuera del área pero sin que Pau López sufriera demasiado. Llegaba ya el descanso cuando Darder se desmarcaba en posición muy peligrosa tras recibir un centro al borde del área, remataba un esférico que se marchaba por muy poco rozado el poste derecho. Las estadísticas al descanso dejaban ver el dominio local sobre el segundo clasificado pues el Espanyol había disfrutado de hasta 10 remates por cinco que había tenía el conjunto blanquinegro. Justo antes de encaminarse hacía los vestuarios, Kondogbia disparaba un cañonazo desde lejos que a punto estaba de sorprender a Pau López pero el balón se marchó desviado. Al descanso la buena noticia es que los de Mestalla seguían con un 0-0 en el marcador y tenían toda la segunda parte para darle la vuelta a un encuentro bastante oscuro hasta el momento.
El inicio de la segunda parte fue más oscuro que el primer tiempo. El Valencia siguió perdido en un encuentro en el que los del Espanyol le habían cogido la medida. Neto, que había estado muy activo durante todo el encuentro, seguía siendo el verdadero protagonista blanquinegro. El conjunto de Quique Sánchez Flores tenía contra las cuerdas al Valencia hasta el punto que en el minuto 65 el técnico valencianista se enganchaba en una discusión con el del Español y Marcelino acababa expulsado. Como si este hecho hiciera despertar a su equipo, tan sólo dos minutos después el Valencia reaccionaba y de las botas de Kondogbia llegaba el 0-1. Cuando mejor estaba el equipo local y más arrinconado estaban los de Mestalla, el marcador se les ponía a favor. A partir de este momento, los blanquinegros empezaron a mejorar en su juego y comenzaron a llegar con mayor peligro a la portería de Pau López. Poco a poco el Valencia fue asediando a un Espanyol que no entendía como había resurgido su rival y ya no era capaz de llegar a la portería de Neto. Al final, en el 83 Santi Mina sentenciaba el partido con el 0-2 en el marcador dejando claro que, a pesar de no realizar el mejor juego en este partido, también es capaz de ganar. En los últimos compases del partido, Carlos Soler tuvo el tercero en sus botas. El Valencia demostró en esta jornada que cuando el equipo está en racha en ocasiones no es necesario desplegar el mejor juego para sumar tres puntos. Por todos es conocido lo caprichoso que es el fútbol pero los méritos poco importan y sí los goles. Los de Marcelino lograron dos tantos pese a no tener demasiadas ocasiones. Mucho premio para un equipo y un castigo excesivo para otro que perdonó demasiado en el primer tiempo.