Nuestra ciudad está llena de historia. Y son muchos los legados arquitectónicos que se esconden por las calles de Valencia, que son una seña de identidad y forman parte del patrimonio histórico y cultural de la ciudad, pero también un reflejo de las civilizaciones que han pasado por Valencia.
Así, en el corazón de la ciudad, en el entorno de la Plaza de la Virgen y la Catedral de Valencia, es donde se encuentran las señales de la Valencia romana. En esta plaza que, en su día, fue el foro romano y el lugar en el que se levantaron los edificios más importantes de la ciudad, se encuentra, en el suelo, el primer emblema de la ciudad.
Otra de las paradas imprescindibles, si quieres descubrir la Valencia antigua, sin duda, es la Plaza de la Almoina. Con más de 2.100 años, este lugar esconde el mayor yacimiento arqueológico de nuestra ciudad. Hoy en día, se puede contemplar los restos de las antiguas termas. Pero además, si quieres conocer más, no puedes dejar de visitar el Museo Arqueológico la Almoina, considerado como uno de los mejores de Europa.
Dirigiéndonos, esta vez, a la Plaza del Arzobispo, 1, podrás descubrir la Cripta de la cárcel de San Vicente Mártir, que custodia una capilla funeraria de la época visigoda. Una visita casi obligatoria para conocer un poco más los elementos arquitectónicos de Valencia.
Por último, no debemos olvidar que los árabes también dejaron un importante legado en nuestra ciudad. Prueba de ello es que, todavía, se conservan restos de la muralla árabe del Rey Abd Al-Aziz. Para admirarla, tan sólo tienes que acercarte hasta el barrio del Carmen, y dirigirte hacia la calle Salinas, uno de los puntos claves para poder ver esta muralla. Asimismo, también puedes acercarte hasta la Torre del Ángel, situada en la calle del Ángel y Beneyto Coll, que, en la actualidad, se ha convertido en una vivienda. Rincones únicos en Valencia que muestran toda la riqueza patrimonial de nuestra ciudad.