Este 2017 se recordará por muchas cosas pero sobre todo en el mundo fallero por ser el estreno del título de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Mucho 'bombo y platillo' se le ha dado a esta distinción pero lo cierto es que sumado a que las Fallas este año han caído en fin de semana el de 2017 se puede convertir en uno de los mejores ejercicios de la historia. Todo el mundo habrá podido comprobar que caminar por la ciudad era sentirse más bien como una sardina enlatada, sobre todo por el centro de la ciudad y a horas como las 14:00 horas con la mascletà o por la noche con los castillos. Las calles de Ruzafa bullían al anochecer y con el encendido de las lucen y centenares de miles de personas buscaban poder contemplar de cerca las fallas de Especial y, de paso, otros monumentos que por el camino se encontraban, sin que faltara un buen chocolate con buñuelos o un refresco fresquito a un euro (tarifa plana estas fallas en el cap i casal).
Según las previsiones que manejaba la Agència Valenciana de Turismo, que hará balance de los datos la semana que viene, la ocupación hotelera ha rondado el cien por cien y casi dos millones de visitantes han pisado las calles de la capital del Turia a lo largo de estos cuatro días. Según declaraba Sandra Gómez, primera teniente alcalde de la ciudad, "los datos provisionales que manejamos nos están permitiendo hablar de las mejores Fallas desde el punto de vista turístico de toda la historia. Hace apenas unos días, con los últimos datos que teníamos, estábamos en el 97% de ocupación hotelera y el precio medio de la habitación había subido un 15 % respecto al año pasado".
Ahora toca hacer balance de las cifras y todas las instituciones se pondrán manos a la obra durante esta semana para confirmar si lo que se ha visto en la calle se traslada a un beneficio económico rentabilizando así la campaña publicitaria a nivel mundial y el hecho de intentar llegar a sectores con mayor poder adquisitivo pues lo que actualmente se "busca es ese turismo más rentable que hace un mayor gasto", según palabras de Sandra Gómez.