La pretemporada no permite efectuar dogmas de fe incuestionables, pero sí permite establecer proposiciones y fundamentos que cuentan con una significación específica para los clubes. Se trata de sensaciones y de percepciones que adquieren trascendencia por la valoración, personal e intransferible, en función de los intereses particulares de cada club. Sucedió en La Nucia en el cuarto bolo programado del verano. Morales estrenó su cuenta anotadora de la pretemporada. El Comandante tomó el relevo de Campaña y Bardhi, en la Ciudad Deportiva Camilo Cano, en materia anotadora si se rememora el nombre de los últimos goleadores de la cita anterior ante el Cádiz en Pinatar Arena. Morales acapara las miradas del período estival. Hace escasas fechas amplió la relación contractual que le vincula con la sociedad azulgrana desde tiempos ya casi inmemoriales. Su ascendente en la entidad de Orriols es cuantificable. Y fija la atención en el desembarco en Primera División.
No hay nada que eclipse ese horizonte lujoso que se muestra. Morales quiere agitar el universo de la máxima categoría desde una posición de preponderancia sobre el interior del verde. Mientras pasan los días, y se acerca la cita ante el Villarreal, que marca la epifanía liguera, nada mejor que conjugar con el gol en aras a recobrar el aliento, el pulso y la tensión necesaria en el regreso al Olimpo del balompié español. Morales cerró una acción colectiva cuando el partido ya se acercaba hacia su ocaso. El hecho denuncia el grado de dificultad que adquirió la confrontación ante el Real Murcia en tierras alicantinas. Antonio Luna se estrelló ante Biel Rivas en el nacimiento del partido. Esta puesta de largo no desnortó a los futbolistas grana. Durante algunos pasajes la escuadra murciana se comportó con energía y con aplomó sobre el verde.
Sucede en ocasiones que las distancias entre los rivales se minimizan. El Murcia exploró los caminos que le conducían hasta Oier. El arquero vasco no escatimó esfuerzos ante Chamorro. Estos partidos presentan otro componente que los jugadores no olvidan; están revestidos de un carácter reivindicativo. Los guantes de Oier sostuvieron al Levante en el primer capítulo de la cita. Muñiz mezcló juventud y veteranía durante los cuarenta y cinco minutos iniciales. El paradigma de esa tendencia fue la configuración de una retaguardia en la que Iván compartía espacio junto a Borja, Kaiser y Aly. Quizás en ese punto del partido las cabalgadas de Iván se convirtieran en la nota más reseñable. El lateral partió hacia el frente con valor y con decisión para doblar a Jason y plantarse con peligro en las inmediaciones del área murciana. En muchos momentos se comportó como un atacante más, siempre presto a minimizar la distancia con la zona defendida por Biel Rivas y a conquistar la línea de fondo.
La noticia es excelente para Muñiz por el significado que esconde. El Levante cambió en la reanudación. Como viene siendo una norma, en el ciclo de encuentros amistosos disputados hasta la fecha, Muñiz optó por mutar la naturaleza del equipo. Al fin y al cabo, se trata de ensayar y de probar diferentes alternativas sobre el verde. Únicamente Oier mantuvo sus botas ancladas al verde. De la catarsis se benefició Morales, pero mucho antes del anuncio definitivo del gol, la escudería azulgrana ofreció muestras de su peligrosidad. El balón adquirió más vivacidad. El duelo se disputaba en la franja del terreno defendido por el Murcia. El Levante marcaba el tempo y su adversario daba dos pasos atrás para guarecerse. Un lujo técnico de Bardhi rozó el premio supremo. Campaña preludió una diana finalmente remachada por Morales.
Ficha Técnica
Levante; Oier, Iván, Espinosa, Verza, Joel, Alegría, Aly, Luna, Jason, Pepelu y Kaiser. También jugaron Shaq, Morales, Toño, Chema, Campaña, Bardhi, Viana, Postigo, Borja y Lerma.Murcia; Biel Rivas, Vega, Gómez, Orfila, Forniés, David Sánchez, Jara, Armando, Chamorro, Llorente y Molinero. También jugaron Isi, Martín, Juanra, Curto, Juanma, Montesinos y Andrés, Fran Navarro, Gandía y Álex Pérez.
Árbitro; Álvaro Cánovas García-Villarrubia. Amonestó a Orfila con cartulina amarilla.
Goles; 1-0. M. 68. Morales.