El Hospital General cuenta con un educador para las personas con VIH

Guardar

El Hospital General de Valencia ha firmado un convenio de colaboración con la Asociación AVACOS-H (Asociación Valenciana de VIH, SIDA y Hepatitis) para que los pacientes que reciben un diagnóstico positivo de VIH tengan la opción de hablar con una persona que ha vivido esa misma experiencia, con total confidencialidad.

El objetivo del Programa PARES, impulsado por esta asociación, es mejorar la calidad de vida de estas personas mediante la educación entre iguales en el entorno hospitalario. Así pues, a través de encuentros que ya están teniendo lugar en la Unidad de Enfermedades Infecciosas los miércoles y jueves, de 9 a 14 horas, se intercambia información entre la persona recién diagnosticada y otra que está en su misma situación. Esta última perfectamente capacitada y sensibilizada para ofrecer apoyo emocional y educación en los diferentes procesos de la enfermedad.

Según explica el jefe de la Unidad de Enfermedades Infecciosas, Miguel García del Toro, "desgraciadamente todavía permanece el estigma relacionado con la infección por el VIH, algunos pacientes incluso lo llevan en secreto y no se abren ni siquiera al personal de psicología del hospital y por eso nos pareció muy interesante tener una persona con un perfil diferente y que, además, es un paciente nuestro y nos conoce".

Estos encuentros favorecen la promoción de conductas de salud, el autocuidado y la reducción de comportamientos de riesgo, al tiempo que mejoran la adherencia al tratamiento antirretroviral y refuerzan la autoestima.

Otro aspecto positivo es que el educador no sólo está en el hospital de forma presencial, también presta atención telefónica, ya que muchas de las consultas tienen que ver con miedos, dudas o ansiedad y así ayuda a hacer frente a los problemas en el momento que surgen, sobre todo durante el primer mes, que es el más duro.

"La relación médico-paciente, por muy estrecha que sea, es diferente a una de igual a igual. Con los pacientes crónicos con los que llevamos muchos años y están totalmente controlados existe ese vínculo, nos cuentan su vida y hay mucha confianza. Pero a los pacientes nuevos que todavía no están fidelizados y a los que les ponemos tratamiento en la primera o segunda cita les viene muy bien contar con esa otra persona que ha pasado por el mismo proceso", señala García del Toro.

Las principales funciones que desarrolla el educador son el acompañamiento al enfermo y a su familia cuando las condiciones del paciente lo favorezcan y no exista impedimento por parte de los afectados, servir de complemento del cuidador primario para facilitar su descanso físico y emocional, así como la expresión de emociones asociadas con el diagnóstico y con el proceso de la enfermedad.

Destacados