La Diputació de València ha invertido cerca de 4 millones de euros en las carreteras del Camp de Morvedre con el objetivo de mejorar la seguridad vial en las vías de la comarca. El proyecto de mayor envergadura es el acondicionamiento de la CV-317 de Sagunto a Canet, señalada como punto negro por la DGT, en la que la corporación provincial tiene previsto destinar cerca de 3,1 millones de euros.
Se trata de una prioridad para el área de Carreteras e Infraestructuras, una vía que soporta un paso diario de 4.000 vehículos. Ya se ha publicado la licitación de las obras, por lo que el comienzo de los trabajos es inminente. “Apostamos por mantener en las mejores condiciones las vías ya existentes y actuar en aquellas en las que hay puntos de conflicto con una elevada accidentabilidad”, ha señalado el presidente de la Diputació de València, Jorge Rodríguez.
Asimismo, el área de Carreteras ha ejecutado ya el asfaltado de la CV-310 en el tramo comprendido entre Torres Torres y Algimia, al que la institución provincial ha destinado más de 500.000 euros; y la renovación de la señalización horizontal y vertical de las carreteras de la demarcación de Bétera-Serra dentro de la comarca, con alrededor de 231.000 euros.
Además de estas acciones ya ejecutadas, el área planea otras cuatro acciones en vías de la comarca: la pavimentación de la CV-314 en el tramo a Sagunto, del punto kilométrico 0+000 al 1+500, con más de 170.500 euros; la pavimentación de la CV-320 a Sagunto en el tramo del polígono industrial, con más de 47.500 euros; la pavimentación de la travesía de Quartell y de la rotonda de la cooperativa, con más de 108.200 euros de presupuesto; y la pavimentación de la CV-334 a Estivella en su acceso a Barraix, con una dotación de 31.500 euros.
35 millones de euros en conservación
Por otro lado, el presidente de la Diputació de València, Jorge Rodríguez, y el diputado de Carreteras, Pablo Seguí, han presentado los nuevos contratos de Conservación y Mantenimiento de la red viaria provincial para los próximos tres años. En ese período 2018-2020, la Diputació invertirá cerca de 35 millones de euros en estas mejoras básicas en los 1.800 kilómetros de vías que recorren los municipios valencianos, con el objetivo de que los habitantes de todas las comarcas puedan tener unas carreteras más seguras. Aproximadamente 6 millones de euros se invertirán en la demarcación Bétera-Serra, en la que están incluidas las carreteras del Camp de Morvedre, junto a las del Camp de Turia, l'Horta Nord y la mayor parte de l'Horta Sud.Por su parte, el diputado de Carreteras e Infraestructuras, Pablo Seguí, ha hablado de “la era de la conservación en las carreteras valencianas”, que se centrará en actuaciones como baches, desniveles, reducción de la peligrosidad en curvas, glorietas, rotondas, mejora del firme y la visibilidad, la adecuación de accesos a municipios y la creación de una red de vías ciclopeatonales “en respuesta a las nuevos usuarios de una red que debe atender las necesidades del siglo XXI”.