La normativa relativa a paisaje, infraestructura verde e inundabilidad mantenía a El Palomar en una situación que le imposibilitaba seguir creciendo como municipio, con límites que impedían su desarrollo. Una circunstancia que tiene fecha de caducidad con la asistencia de la Diputación de Valencia a la elaboración del Plan General de Ordenación Urbana de la localidad.
“Estábamos limitados para crecer por diferentes normativas. Si no hubiera sido por la ayuda de la institución provincial no podríamos haber hecho el Plan General”, ha señalado el alcalde del municipio, Jordi Vila, en un encuentro con la diputada de Asesoramiento Municipal, Conxa Garcia, área encargada de gestionar su elaboración. El texto se encuentra avanzado, a la espera de la presentación de documentación para su aprobación provisional.
“Asistir a los municipios más pequeños es una pieza esencial de la Diputación, dotándolos de todos aquellos servicios necesarios para su funcionamiento”, ha señalado Conxa Garcia. Hasta ahora, El Palomar, un pequeño municipio de la comarca de la Vall d’Albaida de alrededor de 580 habitantes, disponía de normas subsidiarias, con lo que tenía importantes carencias en materia normativa que le impedían crecer como pueblo.
Una de las soluciones que aportará el documento será la ampliación del polígono industrial de El Palomar. Se trata de una de las principales necesidades del municipio, ya que existe una demanda real por parte de las empresas que ya se encuentran trabajando allí y que tienen ánimo de seguir creciendo, lo que contribuirá al aumento de la población y a la generación de puestos de trabajo. Asimismo, el Plan General permitirá mejorar las zonas verdes, disponer de más equipamientos y servicios, así como regular los edificios protegidos.
Además de la elaboración del Plan General, la Diputación de Valencia ha asistido a El Palomar en la actualización de su inventario de bienes, un requisito exigido a los ayuntamientos desde 2014, pero que el Ministerio de Hacienda demanda tener actualizado este año. Esta herramienta permitirá al Consistorio saber con qué bienes cuenta y qué valor tienen, con todo lo que ello supone a la hora de tomar decisiones, como la demanda de préstamos.