La Delegación de Memoria Histórica recuerda a los ‘niños de la Guerra’ y apuesta por la difusión de la historia reciente

Tant Ruiz com Cabra destaquen la necessitat que s'estudie en els instituts la Guerra Civil i la repressió franquista, i criden l'atenció sobre la “diferència de tracte” als refugiats a Europa, en comparació de l'acolliment dels exiliats espanyols a Rússia

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“Ha habido épocas en que hemos sufrido mucho en nuestro país y nos han salvado en un país ajeno. Queremos que estudien en los institutos esta historia”. Es la reivindicación de Araceli Ruiz, una ‘niña de la Guerra’ cuyo relato vital, transcurrido en buena parte entre Rusia y Cuba, escucharon este miércoles las paredes del Salón de Reinas de la Diputación de Valencia, donde la recibió la diputada de Memoria Histórica, Rosa Pérez Garijo.

Con motivo de una exposición que se exhibe en el Octubre Centre de Cultura Contemporània sobre las vivencias de Araceli Ruiz y los casi 3.000 niños que fueron evacuados por el Gobierno de la República a la antigua Unión Soviética hace 80 años, la Diputación invitó a varias personalidades del ámbito de la Memoria Histórica a conocer el trabajo de la Corporación provincial en este campo.

Rosa Pérez Garijo señaló que “hay mucho por hacer” en Memoria Histórica para alcanzar los ideales de “justicia, verdad y reparación”, y criticó que la etapa de la Guerra Civil y la represión franquista “no se ha estudiado durante muchos años, por lo que muchos tenemos conocimiento de lo que pasó porque nos lo transmitieron en nuestra casa”.

“Yo cuento mi vida, simplemente mi vida, pero es vuestra historia; vosotros no lo habéis pasado, pero preguntad a vuestros padres”, coincidió Araceli Ruiz ante una colección de fotografías en blanco y negro que le mostraba a la diputada.

En este sentido, Pérez Garijo explicó que la Corporación ha elaborado un documental sobre el golpe de Estado, la Guerra Civil, la represión franquista, la vida en las cárceles y la Transición en el marco del programa “La Memòria a l’escola” que se llevará a los institutos valencianos este año, y ha enviado lotes de libros sobre la materia a las bibliotecas de varias decenas de municipios con el programa “La Memòria a la biblioteca”.

En la misma línea de difusión, la exposición “Els ‘niños de la Guerra’ expliquen la seua vida, expliquen la teua història” muestra la tragedia de los jóvenes exiliados “para que no se olvide, para que se conozca, para que los muchachos de ahora puedan saber lo que sucedió”, explicó Dolores Cabra, secretaria general de Archivo, Guerra y Exilio (AGE) y coordinadora de esta iniciativa, que visitará las tres ciudades principales de la Comunitat Valenciana.

Cabra criticó las políticas que intentan “sellar la voz de los que tenemos muchas cosas que contar” y consideró “importante la labor de la Diputación para ayudar a los grupos que tanto trabajo hacemos para darnos un poco de voz en este mundo tan turbulento”.

Araceli Ruiz, una ‘niña de la Guerra’ que trabajó 12 años en el Comité estatal de radio-televisión ruso, aseguró estar “contenta” con el trato y la educación que recibió en el país soviético, aunque “aquí no hubiera pasado tanta hambre y frío”. “No he tenido suerte en España aún, pero estoy esperando”, bromeó.

En este sentido, la secretaria general de AGE convino que las memorias de los niños de la Guerra que fueron acogidos por Rusia, un hecho del que se cumplen 80 años, llaman la atención sobre la diferencia de trato a los refugiados que llegan actualmente a Europa y se encuentran con puertas cerradas solo por su nacionalidad.

Ruiz reivindicó “que llegue a la conciencia humana” la necesidad de solidaridad entre las naciones y “que se presenten voluntarios como entonces” para paliar la emergencia humanitaria que asola varios países en guerra. “Ha habido épocas que hemos sufrido mucho en nuestro país y nos han salvado en un país ajeno”, apostilló.

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