Juan Galán: 'Todo el mundo debería ser donante de órganos'

A la Comunitat Valenciana es van practicar 590 trasplantaments d’òrgans en 2017

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La Comunidad Valenciana ha liderado el número de trasplantes y donaciones en 2017. Un incremento del 31% de las donaciones, y un 20,16% de los trasplantes, que se ha traducido en un total de 590 trasplantes de órganos, 100 más que en 2016. El Hospital La Fe de Valencia ha sido el que más intervenciones de este tipo ha realizado a nivel nacional. Y es que a lo largo del 2017, se practicaron 354 trasplantes, siendo líderes en trasplantes hepáticos y cardíacos.

Para conocer cómo funciona este proceso que cambia vidas, València Extra ha hablado con Juan Galán, Coordinador de Trasplantes del Hospital La Fe de Valencia, que ha destacado la importancia de convertirse en donante de órganos.

La Fe ha sido líder en trasplantes en la Comunitat. ¿Existe una mayor concienciación?

Ha sido un año muy bueno, y esto tiene dos explicaciones: El trabajo, durante años, de muchas personas siguiendo las directrices de la Organización Nacional de Trasplantes, y la puesta en marcha de nuevas formas de trasplantes de órganos. Ahora la gente se sorprende, pero lo llevamos haciendo desde 2012, y ahora está dando sus frutos. La casualidad no existe. Esto ha hecho que el número de donantes se incremente.

La Fe es un hospital privilegiado porque somos un referente en trasplantes pulmonares, cardíacos o pancreáticos de toda la Comunidad Valenciana, y es una comunidad de cinco millones de habitantes, aproximadamente. Así que el mérito ha sido organizar un equipo de trasplantes que está operativo todos los días del año, y en cualquier momento.

Así, el aumento de donaciones y trasplantes se debe a una buena organización, un trabajo de mucho tiempo y unos equipos que cuando se les pide que vengan a trabajar, vienen. Independientemente de que sea domingo o el día de Navidad. Tenemos suficiente personal y suficiente capacidad para asumir el reto de tener que trabajar en cualquier día del año. Pero eso, en el fondo, es buena organización y ganas de trabajar.

¿El proceso de trasplante ha avanzado notablemente en los últimos años?

Los trasplantes es una cosa viva. Es la punta de lanza de la asistencia médica y la investigación médica, y los trasplantes que hacemos hoy en día, no tienen nada que ver a los que hacíamos hace 25 años, cuando empezamos. Han cambiado muchas cosas, como las técnicas de algunos trasplantes o los criterios de donación. Y todo eso se nota.

¿Los trasplantes tienen un porcentaje de éxito elevado?

El trasplante es una técnica médica que tiene unas indicaciones muy precisas, y como cualquier técnica médica tiene éxitos y fracasos. Ni es un milagro ni es una solución universal. Se practican trasplantes porque a los enfermos les damos una mejor expectativa de vida o una mejor calidad de vida. Pero el trasplante lleva implícito un riesgo. Hay personas, afortunadamente poquísimas, que fallecen en la intervención quirúrgica. Y, por otro lado, el primer año es el más traumático en un trasplante porque el paciente empieza a utilizar los tratamientos para evitar un rechazo al órgano trasplantado, y el riesgo de infección es grave. Ese primer año es muy difícil para los pacientes, pero una vez superado, aunque el trasplante no te dé la vida eterna, pero te da una expectativa de vida que antes no tenías. Y por eso lo hacemos. Porque el resultado es mejor si trasplantamos, que si dejamos que la enfermedad evolucione de forma natural, ya que cuando se realiza el trasplante es porque se trata de una enfermedad crónica incurable, que ha agotado sus posibilidades terapéuticas.

¿Existen unos requisitos para ser donantes?

Todo el mundo puede ser donante. Es más, todo el mundo debería ser donante. Hoy en día, no hay ningún argumento para que una persona no quiera donar sus órganos, y, afortunadamente, la sociedad ha cambiado para bien. Entonces, cualquier persona puede ser donante, pero cada órgano y cada persona tiene unas connotaciones. Tienes que asegurarte, siempre, que el órgano no implique el riesgo de transmisión de alguna enfermedad al receptor.

De esta manera, hay ciertas contraindicaciones, bien por la existencia de un proceso tumoral activo, por infecciones no controladas, para algunos órganos la edad es importante y para otros no, etc. Pero en líneas generales todos pueden ser donantes. Hay gente que piensa que una persona de 80 años no puede donar, pero perfectamente lo puede hacer y salvar la vida a una persona. Evidentemente, un corazón de 80 años no lo podemos trasplantar, pero se han trasplantado, en este país, pulmones de 80 años que han funcionado. Hemos aprendido que la edad no es un límite, y con la experiencia , el avance y la evolución de nuevos tratamientos, hoy en día, nos atrevemos a trabajar con ellos, y siempre con buenos resultados.

Por último, ¿Cómo puede una persona convertirse en donante de órganos?

En principio, no hay un registro nacional de donantes. Pero, por ejemplo, nuestra comunidad tiene una tarjeta de donantes que está a disposición de quien la quiera pedir en los servicios de atención al paciente. Y si no, en cualquier coordinación de trasplantes de cualquier hospital, esta tarjeta está a su disposición.

También, te puedes hacer donante haciendo un documento de voluntades anticipadas, manifestando tu voluntad de que, cuando fallezcas, tus órganos sean destinados a trasplantes, si ello es posible, ya que los órganos tienen que morir en determinadas condiciones para que podamos prolongar su funcionamiento.

Pero la mejor forma de ser donante, a parte de tener la tarjeta o el documento de voluntades, es decírselo a tus familiares porque los coordinadores tenemos la obligación de comprobar la voluntad de donar. Así, aunque alguien no esté muy de acuerdo, todos tenemos el sentimiento de respetar las últimas voluntades finales del fallecido. Entonces, al final, eso es lo más fácil. Pero, por supuesto, siempre se puede dejar documentado.

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