"Foodie": cuando la comida se convierte en pasión

Milions de persones al voltant del món s’identifiquen sota una mateixa consigna: la seua passió per la gastronomia

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Si bien el término "foodie" existe desde hace más de 30 años, su llegada y acogida en España es bastante más reciente. El término es un anglicismo cuyo origen se encuentra en el libro "The Official Foodie Handbook" ("El Manual Oficial para Foodies"), de Paul Levy, Ann Barr y Mat Sloan. El término se refiere a aquellas personas que sienten gran pasión por la gastronomía sin necesidad de ser expertos culinarios o chefs. Simplemente son cocineros amateur, y a veces ni siquiera eso, en muchas ocasiones son personas a las que simplemente les interesa el mundo de la cocina y qué hay detrás de la comida.

Este fenómeno parte de la sociedad americana, en la que existe una fuerte cultura de la comida rápida. Los foodies pretendían huir de esta comida rápida y precocinada, en busca de una alternativa más sana y diferente. Es aquí donde nace el germen de la cultura foodie: en la búsqueda de nuevos sabores y experiencias desde una perspectiva cercana a la gente corriente.

"Los foodies no utilizan expresiones como "fine-dining" (comida de lujo) o "dining experience" (experiencia de comida), pues para ellos es un símbolo de pedantería".

-Paul Levy.

Generalmente existe una confusión entre los términos "foodie", "gourmet" y sibarita. Mientras que los sibaritas son gente de gustos extremadamente refinados y ostentosos y los gourmets son gente con un gusto muy delicado y un paladar extraordinario, capaces de apreciar las más mínimas sutilezas de sabor en cada plato, los foodies son gente con ansia por el conocimiento sobre lo que detrás de la comida. No se dejan llevar por la opulencia de los platos ni por la refinada meticulosidad con que son preparados, sino por la innovación.

De la cocina al #foodporn

Dentro de este fenómeno ha surgido lo que se conoce como pornografía de comida, lo cual se ha convertido en unos de los hashtags más usados en las redes sociales (#foodporn). Esta tendencia consiste en la realización de platos que tengan un impacto visual realmente placentero, dándose sobre todo en la repostería. Algo tan sencillo como el mero hecho de ver cómo se esparce el chocolate de un coulant al partirlo con una cuchara o de observar cómo se escurren el queso derretido y las salsas de una hamburguesa al apretarla ha conquistado internet.

La increíble expansión de esta tendencia ha impactado fuertemente en el mundo de las redes sociales, creándose cada vez más páginas y canales de comida y gastronomía foodie. De ello deriva la aparición de los llamados "foodie influencers", creadores de contenido basado en comida. Y dentro de estos influencers, cobran importancia los "foodie instagramers", usuarios de la red social Instagram que dedican sus cuentas a subir fotografías de platos que combinan estética con gastronomía y que poco a poco están conquistando la red social de fotografía más grande del mundo, llegando a haber cuentas como "@symmetrybreakfast", que superan con creces los 750.000 seguidores. SymmetryBreakfast se dedica a preparar desayunos típicos de distintos países y sube fotografías de ellos que combinan la simetría, y la gastronomía con una delicada paleta de colores, haciendo de cada plato una obra de arte.

 

Además, cada día aparecen nuevos contenidos y formas de contenido: desde galerías de imágenes a fotorecetas o vídeos, en los que la imagen tiene un valor casi artístico. Gran ejemplo de ello es el de "Tasty", una de las mayores páginas de Facebook que se dedica a publicar contenido referido a recetas, que lleva en activo desde el 2015. Los vídeos de Tasty muestran recetas de platos con un fuerte atractivo visual, pero de preparación no excesivamente costosa, cosas que prácticamente son el mantra foodie.

En muchos de estos vídeos, los cocineros cuentan qué significa el plato que están preparando para ellos, qué hay detrás del plato, etcétera, compartiendo sus experiencias con el público. Y de vez en cuando invitan a algunos "foodie influencers" o celebridades a que preparen algún plato especial para ellos, siguiendo esta misma metodología.

Foodies "made in Spain"

Sin embargo, el foodie no se queda solamente en las redes sociales, sino que ha saltado a plataformas de vídeo como forma de entretenimiento. Creadores de contenido, o youtubers, como Sergio Enciso, más conocido como "El Pirata", que, en su canal "La Cocina del Pirata", hace la boca agua a sus espectadores preparando geniales platos originarios de series de televisión, anime y videojuegos, y gracias a lo cual ha conseguido más de 700.000 suscriptores y acumula un total de más de 67 millones de visitas. En sus vídeos, "El Pirata" crea un genuino espacio lleno de temática pirata, humor y deliciosas recetas en las que suelen colaborar otros youtubers, ya sea en desafíos culinarios o acompañándolo en sus recetas.

Y blogueros, como Mikel López Iturriaga, cuyo blog de El País "El Comidista" da nombre a la traducción española del término foodie, también forman parte del fenómeno. En El Comidista, López Iturriaga hace un repaso a la cultura gastronómica del país y habla de todo lo que envuelve el mundo de la comida, a la vez que consigue mostrar las maravillas que ofrece la gastronomía española.

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