La Devesa-Albufera es sin duda uno de los grandes tesoros que tenemos los valencianos y por eso hoy con la nueva sección de Medio Ambiente contamos con el Regidor de la Devesa-Albufera, Sergi Campillo con quien hablamos de pasado, presente y futuro.
¿Qué balance haces de estos dos años en la Concejalía de la Devesa-Albufera?
Respecto a Devesa Albufera, que yo entré en la Concejalía, me sorprendió que a pesar de que el anterior gobierno no era especialmente ecologista, el equipo funcionarial de la Albufera había hecho muchas cosas en el Parque Natural y de hecho, son un grupo reconocido a nivel internacional por el trabajo como por ejemplo la restauración dunar, me impresionó el amor por la Devesa y la Albufera y cada último sábado de cada mes se hace una actividad abierta a toda la ciudadanía y lo echan de su horario. Me encontré un equipo muy competente y muy comprometido y esto lo valoro. Durante estos dos años hemos incidido mucho en tema de la educación ambiental, con cartelería nueva, hemos protegido el sistema dunar de la parte del Salero, hemos hecho muchísimas cosas.
Como biólogo, ¿Qué consideras que necesita la Albufera para protegerla?
Ahora hay una exposición en la Nave co-organizada con el Ayuntamiento de Valencia, absolutamente recomendable porque hace un recorrido de cómo era la Devesa antes, como es ahora, cómo ha sido el proceso de restauración. Si hablamos del lago, necesita entrada de agua limpia y esto sólo puede venir del Ríe Júcar. Era una laguna de agua salina. Es un parque natural pero no deja de ser un producto de intervención humana. Necesita que el agua del Júcar vuelvo a entrar. Si entrara como mínimo 50-70 hectómetros cúbicos anuales, el lago se recuperaría muchísimo, lo estamos viendo ya. En los últimos años, hace dos años empezó a aparecer la vegetación subaquàtica y esto es porque se ha mejorado los sistemas de depuración. Hacía décadas que no se veían y ahora están empezando a salir.
Estamos intentando hacer entender a la Confederación Hidrográfica del Júcar. Están mostrándose abiertos y estamos haciendo reuniones entre el Ayuntamiento, la Generalitat con la Confederación, podremos conseguir mejorar mucho la calidad. Si es el bosque, está muy recuperado. Quedan algunas partes para restaurar, algunas cosas que tienen que solucionar cómo es la recuperación del espacio donde se encuentra el Sidi el Salero. No tiene sentido que haya un hotel en primera línea de playa rompiendo un cordón dunar que nos ha costado mucho recuperar.
¿Qué queda por hacer en estos dos años?
Respecto a la Devesa-Albufera quedan cosas importantísimas, queda negociar y conseguir una asignación de agua del Ríe Júcar por parte de la Confederación hidrográfica del Júcar que sea a lo largo de todo el año. Hemos conseguido un acuerdo histórico de gestión las compuertas del lago de la Albufera, queda avanzar en el par natural en la restauración de elementos del bosque de la Devesa, incidir en temas de educación ambiental. Queda un poco abordar y poner en valor el parque natural como una de las principales fuentes de recursos económicos de la ciudad de Valencia. La Devesa supone una aportación económica importante de la ciudad. Se está recuperando la pesca y se ha aumentado, se está recuperando la anguila de la Albufera y se tiene que ver con una mirada su enorme valor económico de la ciudad.
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