Quart de Poblet ha acogido esta mañana una jornada de evaluación y puesta en común de los resultados del proyecto europeo Photocitytex, enmarcado en el programa de la Unión Europea Life+, que ha convertido el municipio en el primero europeo en tener instalados toldos y lonas anticontaminación. Tratamiento de la contaminación del aire en entornos urbanos europeos por medio de textiles fotocatalíticos” (Photocitytex) está coordinado y liderado por el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM) y en él participan el Ayuntamiento de Quart de Poblet, la Asociación de Investigación de la Industria Textil (AITEX) y dos instituciones italianas: LEGAMBIENTE y Next Technology Tecnotessile (NTT). A la jornada han asistido la alcaldesa de Quart de Poblet; Carmen Martínez, el secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro; el diputado de Proyectos Europeos y Servicios Innovadores en la Diputación de Valencia y concejal en Quart de Poblet, Bartolomé Nofuentes, y el director de Fondos Europeos de la Fundación Finnova, Juan Viesca.
Amalia Muñoz, investigadora sénior de la Fundación CEAM y coordinadora de Photocitytex, Mila Ródenas, investigadora del proyecto, y Eduardo Fages, responsable G.I. de Materiales y Sostenibilidad del Instituto Textil Aitex, han explicado las claves de este proyecto, en el que se han desarrollado unos textiles para toldos y lonas que llevan dióxido de titanio y que con la exposición solar son capaces de transformar sustancias muy nocivas, como los óxidos de nitrógeno, en otras menos perjudiciales (nitritos y nitratos) que se pueden eliminar a través del agua. Las pruebas se han realizado en dos medios diferentes: La cámara de simulaciónEuphore del CEAM, una de las mayores de Europa, que dispone de un gran conjunto de instrumentos analíticos para investigar procesos químicos que ocurren en la troposfera en condiciones casi reales y en la que las personas responsables de este proyecto han simulado las condiciones de la calidad del aire que se dan en tres ciudades: Bolonia, París y Quart de Poblet. Los resultados aquí han superado las expectativas iniciales, ya que se ha demostrado la capacidad de las telas de toldo (las de lona tienen resultados más discretos pero mejores de los previstos) de reducir un 88% en una hora los óxidos de nitrógeno. El siguiente banco de pruebas ha sido Quart de Poblet, donde se instalaron toldos en el colegio Ramón Laporta, ya que al lado tiene una estación de medición de la calidad del aire, y lonas en el túnel de la avenida 9 d’octubre, puesto que se trata de un punto de tráfico denso al lado de la autovía A3. Tras dos años y medio de trabajo, con 58 semanas de mediciones, 15.370 muestras tomadas y análisis realizados, y dos campañas intensivas de verano e invierno, los resultados son muy satisfactorios. Las telas de toldo han reducido los óxidos de nitrógeno entre un 35 y un 50%, y las de lonas publicitarias, entre un 24 y un 25%, en función de la época del año. Entre estos compuestos nocivos, además la disminución de dióxido de nitrógeno es de entre el 43% y el 54% con los toldos y de entre el 23% y el 45% con lonas. También han destacado que un valor añadido con el que se han encontrado es que han detectado en los ensayos en Euphore una disminución de ciertos gases, como el tolueno, emitidos por los coches, y que estos tejidos como consecuencia de la fotocatálisis no liberan otros compuestos nocivos, con los cual no tienen “efectos secundarios” En conclusión, “aunque no es un método de descontaminación definitivo, los textiles fotocatalíticos pueden complementar otras medidas menos populares para ayudar a alcanzar valores más saludables (como restricciones del tráfico), lo que hace que estas sean menos severas para la ciudadanía”, han destacado en su exposición, en la que alientan a las autoridades “a considerar esta solución dentro de sus planes de gestión medioambiental por sus claros beneficios sobre el aire urbano y sobre la salud”. Eduardo Fages ha detallado todo el proceso seguido hasta dar con textiles y procesos de elaboración que tanto para toldos como para lonas, del tipo de las utilizadas en publicidad, permitieran una mayor impregnación de dióxido de titanio en escala nanométrica (un millón de veces inferior al milímetro). Asimismo, ha explicado que el proceso de fabricación de estos tejidos apenas se encarece, lo que determina su viabilidad económica, y que están trabajando para poder hacer de esta investigación un producto comercial, aunque ha sido cauto en esta cuestión. En la jornada, tanto Bartolomé Nofuentes como Juan Viescas se han centrado en desgranar las diferentes líneas de financiación que la Unión Europea tiene a disposición de los municipios y las personas emprendedoras. Más de 960.000 millones de euros que si no se si no se utiliza por entidades de la Comunitat Valenciana irán a parar a otros lugares, por lo que han instado a presentar proyectos. La alcaldesa, Carmen Martínez, ha querido destacar que Photocitytex ha permitido a Isabel Tornero, una joven de Quart de Poblet con formación en el sector de la moda, iniciar el desarrollo de un proyecto para incorporar los tejidos fotocatalizadores al uniforme de los jardineros del Ayuntamiento, lo que da un valor añadido a la iniciativa. Por su parte, Julià Álvaro ha incidido en que resolver las cuestiones medioambientales “es el gran reto de la Humanidad” y que la calidad del aire es un grave problema ante el que las instituciones deben ser “sensibles” porque es causa de muchas de las enfermedades y muertes prematuras que se producen en Europa. Asimismo, ha reafirmado el compromiso de la Generalitat con instituciones como el CEAM.La jornada ha servido también para conocer otros cuatro proyectos medioambientales con financiación europea: Técnicas para la mejora de la calidad del aire urbano (TECNAIRE), presentado por Rafael Borge, de la Universidad Politécnica de Madrid; Tecnologías fotocatalíticas en pavimentos urbanos (PHOTOSCALING), expuesto por Eva Jiménez, del Instituto Eduardo Torroja del Centro Superior de Investigaciones Científicas (IETcc_CSIC); Caracterización de la concentración de nanomateriales en distintos ambientes, explicado por Carlos Fito (ITENE), y un cuarto centrado en el papel activo de la ciudadanía en los proyectos europeos ligados a la ciencia, desarrollado por Lidia Castagnoli, de Legambiente Emilia Romagna, que es una de las instituciones socias en el Photocitytex.