El Valencia CF perdió en La Rosaleda ante el Málaga por 2-0 por culpa de cuatro minutos muy negativos para los de Mestalla, del 36 al 40, en los que sufrieron los dos goles locales y de los que ya no pudo recuperarse en la segunda mitad. Esta derrota rompe una muy buena racha de cuatro jornadas consecutivas sin perder, con tres victorias y un empate.
El Málaga fue el que salió dominando, aunque sin peligro para Diego Alves. Tuvo mucha posesión, mucho toque, pero de forma horizontal y sin ninguna verticalidad. Mientras el Valencia CF apenas sufría y en el minuto 22 una buena acción entre Lato y Munir acabó con disparo cruzado del ‘9’ que salió fuera por poco. El primer remate de los hoy naranjas que en su primera aproximación seria al marco de Kameni a punto estuvo de hacer el 0-1. Poco después Medrán también probó fortuna con un remate potente desde lejos que se fue alejando del marco local por el efecto del golpeo del centrocampista andaluz.
Pasada la media hora de juego Munir reclamó una pena máxima por derribo de Rosales que Iglesias Villanueva no señalizó pese a las protestas de los valencianistas. Parece imposible que los colegiados piten algún penalti a favor este año para los de Mestalla. Así es el fútbol. De un error muy negativo el Málaga sacó petróleo de ello y Recio, desde muy cerca, marcó el 1-0 de cabeza tras un centro de Ontiveros en el minuto 36.
Y poco después, Sandro hizo el segundo de un chut desde fuera del área que pegó en Mangala y descolocó a Diego Alves. En un visto y no visto el Málaga hizo muño daño al Valencia CF que, por si no había tenido mala suerte en esa acción del tanto local, vio también cómo Garay tuvo que ser retirado en camilla con un collarín tras un saque de falta precisamente de Sandro, que le pegó en la cara y que le dejó K.O. en el césped. Voro metió a un futbolista más ofensivo como Orellana por el central en busca de mejores sensaciones de cara a la segunda parte.
Tras el descanso el Valencia CF salió más intenso y ya no le dejó apenas el control del juego al Málaga, que se mostraba más conservador con esa ventaja en el marcador sin ganas de arriesgar lo más mínimo. Pese a ello Sandro tuvo el tercero en una rápida salida a la contra, pero se topó con Diego Alves que detuvo con los pies.
Pasaban los minutos sin apenas oportunidades en una y otra área. Voro sacó toda la pólvora atacante que le quedaba en el banquillo con la entrada de Nani y Zaza. Y pudo cambiar la dinámica en un mano a mano de Santi Mina con Kameni que el portero supo defender con una gran intervención. Y Mangala también buscó el gol, pero Llorente lo impidió. Y el propio central internacional galo envió el balón al poste al pegarle mal al balón. Al final, derrota en Málaga por culpa de cuatro minutos en los que el Málaga acertó con los dos goles del partido.