A partir del próximo 1 de agosto, los centros de salud dejarán de contar con ambulancias para atender los avisos domiciliarios urgentes. Una situación que, aunque no afectará a los hospitales, desde el Sindicato de Enfermería SATSE han denunciado que afectará considerablemente ‘al tiempo de respuesta de la asistencia urgente’ mermando la calidad de la atención médica. Y, ¿a qué se debe este cambio? Al nuevo contrato de ambulancias externas para el transporte de enfermos y personal sanitario que firmó la Conselleria de Sanidad, por una cuantía de 234.597.924,68 euros, y que excluía este traslado del personal sanitario para realizar visitas domiciliarias desde los centros de salud.
El personal sanitario deberá desplazarse andando o en su propio vehículo y, una vez en el domicilio, decidir si llama a la ambulancia
Un contrato que el Sindicato de Enfermería denunció, el pasado mes de diciembre, ante la Inspección Provincial de Trabajo, ya que, de no ponerse una solución, las enfermeras y los médicos deberán acudir con sus propios vehículos o andando a los domicilios de los pacientes que requieran atención. Una vez allí, y dependiendo de la gravedad, serán los que decidan si llamar o no a las ambulancias. Una situación que, de acuerdo con el sindicato, ‘no solo se producirá un retraso en la primera asistencia, sino también en la espera de la llegada de la ambulancia que puede ser vital en caso de que sea necesario trasladar al enfermo a un hospital’.
La Jefatura autonómica de Inspección de Trabajo ha emplazado a la Conselleria de Sanidad a negociar y llegar a un acuerdo para buscar soluciones a las denuncias presentadas que, además de la retirada de estos vehículos, también incluía que no disponían de vehículos oficiales para la realización de consultas programadas y urgencias no vitales en el horario normal de funcionamientos de los centros de salud. Sin embargo, por el momento, no ha habido respuesta y, desde el sindicato denuncian que ‘han pasado dos meses y no se nos ha convocado en ninguna de las mesas de negociación’.
En este sentido se muestran sorprendidos de que ‘de forma unilateral se vaya a aplicar estas condiciones de la empresa adjudicataria’, ya que les obligará, a partir del 1 de agosto, a utilizar los vehículos particulares del personal sanitario para las atenciones domiciliarias, sean urgente o no, o bien a que cada departamento de salud busque una solución al transporte de personal. Hasta ahora, estas ambulancias se utilizaban desde las 15:00 horas hasta las 08:00 horas, cuando el médico de familia dejaba de estar operativo, y los avisos domiciliarios pasaban a ser atendidos por los doctores de atención primaria. Sin embargo, de momento, habrá que despedirse de estos vehículos oficiales de manera indefinida.