Hace casi diez años desde que el antiguo zoo de Valencia, ubicado en Viveros, cerrara sus puertas. Sin embargo, gracias al Plan Confianza, este lugar, pronto, se convertirá en un moderno jardín completamente integrado en los Jardines de Viveros.
Esta inversión, de algo más de 1,5 millones de euros, no sólo ha servido para unir la parte seccionada del zoo a los jardines, a través de una restauración paisajística, sino que además se ha destinado a la urbanización y apertura de la calle Pintor Genaro Lahuerta y calle Flora, así como la reurbanización y peatonalización de la calle Vuelta del Ruiseñor.
Las fosas y las jaulas del viejo zoo han desaparecido para dar paso a la creación de recorridos peatonales, en los que, además, se ha mantenido el arbolado con el que contaba el antiguo zoo de Viveros. Con estas obras, se pone punto y final a la mejora del entorno del Museo de Bellas Artes que, a pesar de ser considerada la segunda pinacoteca de España, se ubicaba en una de las zonas de Valencia más olvidadas.
Con la apertura de este espacio, valencianos y visitantes tendrán la oportunidad de disfrutar de un nuevo espacio verde en la ciudad que, seguro, volverá a albergar en su interior risas, actividades y buen ambiente.